* La operación, se ha hecho con cargo al contrato anual de conservación de monumentos públicos y ha permitido devolver este elemento a un perfecto estado de conservación
Aspecto que presenta la esfera de la Plaza de Cuba tras los trabajos de conservación a que ha sido sometida
Entre los muchos trabajos que la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente realiza cada año para garantizar el buen estado de los numerosos monumentos públicos que salpican las calles y plazas de Sevilla, se encuentran los realizados los últimos días en la esfera armilar –también conocida como Milla Cero- ubicada en la Plaza de Cuba, y que recuerda la primera vuelta al mundo, cuyo 500 aniversario se conmemora en estos momentos.
Este monumento, instalado en el año 2010 en este punto de la ciudad donde se encontraba el antiguo Muelle de Mulas del que partieron las naves de Magallanes y Elcano en agosto de 1519, ha sido objeto de un profundo tratamiento de limpieza que ha permitido devolverle todo su esplendor. De esta forma, el elemento, cuyo interior es de acero inoxidable y su exterior de acero corten, presentaba abundante excremento de palomas así como otros restos, además de daños superficiales provocados por incrustaciones, oxidaciones y grafitis. Urbanismo ha resuelto todas estas patologías y ha restituido el buen estado general al monumento, lo que se refleja en un aspecto y tono uniformes.
La actuación se ha acometido en el marco del contrato de conservación de monumentos públicos de la ciudad que este organismo celebra cada año, y que esta anualidad ha incrementado su presupuesto hasta los 151.250 euros. Recaído en la empresa especializada BENZA CONSERVACIÓN Y RESTAURACIÓN, este contrato va dirigido a garantizar el mantenimiento de los elementos de carácter monumental ubicados en los espacios públicos, cuya custodia y conservación corresponden a la Gerencia de Urbanismo, eliminando patologías que puedan derivar más adelante en daños graves. Se trata, en definitiva, de contar con los medios humanos y materiales con que poder hacer frente al deterioro de estos elementos (esculturas, fuentes ornamentales, placas conmemorativas, retablos y mobiliario histórico) para reintegrarles sus valores estéticos, artísticos y patrimoniales. De igual forma, este servicio permite a la Gerencia de Urbanismo responder de manera ágil y rápida ante circunstancias imprevistas, garantizando actuaciones de carácter urgente, que impliquen riesgos para las personas o para la integridad del monumento en cuestión.
Las labores más comunes que se realizan se centran en trabajos de limpieza, de eliminación de grafitis, de aplicación de tratamientos biocidas y consolidaciones pétreas puntuales.
Desde que se adjudicara, a mediados del pasado mes de febrero, se han realizado intervenciones de este tipo en las columnas de la Alameda de Hércules, el Mural Verbo América –en el recinto de la Cartuja junto al puente de la Barqueta, las esculturas conocidas como Muchachas al sol –en la glorieta de las Cigarreras del barrio de los Remedios-, el Monumento a la Tolerancia –en el muelle de la Sal- y, en la Cruz de la Plaza de Molviedro.
Una vez concluidos los trabajos en la esfera armilar de la Plaza de Cuba, los próximos días se iniciarán los propios en el monumento dedicado a María Auxiliadora, en la Plaza de San Martín de Porres, en Triana. También aquí se llevará a cabo una limpieza general del conjunto que abarcará a la figura de bronce, la peana y el parterre que lo rodea.
Los siguientes monumentos en los actuará son los dedicados a las figuras del torero Juan Belmonte, en la Plaza del Altozano de Triana, y al militar Simón Bolívar, en el Paseo de las Delicias.