* La zona con graderío de la calle Fuente de Cantos y la Plaza José Hormigo González están siendo acondicionadas para garantizar su uso en perfectas condiciones de seguridad
Responsables políticos, técnicos de Urbanismo y vecinos junto a las gradas del auditorio de la calle Fuente de Cantos que van a ser reparadas
La Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente ha comenzado a ejecutar obras de acondicionamiento de dos amplios espacios libres dela Urbanización Nueva Bellavista, en el barrio de Bellavista de Sevilla. Se trata concretamente de la zona con gradas ubicada en la calle Fuente de Cantos y, de la superficie situada al sur dela Plaza José Hormigo González, ambas junto a la banda de aparcamiento dela calle Caldereros.
Los dos espacios que se intervienen presentan un mal estado de conservación como consecuencia sobre todo de la falta de mantenimiento, y elementos que no se ajustan a la actual normativa de accesibilidad. Estas circunstancias dificultan hoy por hoy su uso y disfrute por los vecinos de la zona además de poner en riesgo su seguridad.
Para devolver estos espacios a unas condiciones urbanísticas adecuadas y garantizar la completa seguridad y accesibilidad de los mismos, Urbanismo ha redactado y aprobado sendos proyectos técnicos que ha comenzado a ejecutar conjuntamente estos días.
Espacio de la calle Fuente de Cantos
Se trata de una zona, de unos 1.700 m2 de superficie, dividida funcionalmente en dos áreas diferenciadas. La situada más al norte está formalizada por un espacio diáfano con seis bancos, en tanto que en la orientada hacia el sur se conforma un auditorio al aire libre, destinado a ofrecer actividades de tipo cultural y ocio a la población del barrio. Esta parte se encuentra actualmente en desuso a causa de su mal estado como consecuencia de la falta de mantenimiento.
En concreto, el graderío de este auditorio está realizado con losas de hormigón armado que se encuentran muy deterioradas, con numerosas pérdidas de material por la oxidación del armado interior. Por otra parte, la rampa lateral por la que se accede, junto con dos escaleras que discurren entre las gradas, presenta una pendiente no ajustada a la normativa de accesibilidad y no cuenta con pasamanos en un lateral, que garantice su uso por personas con movilidad reducida. Por último, La barandilla metálica de protección que bordea el auditorio está oxidada y le faltan barrotes en algunos tramos, lo que invalida su función como barrera protectora ante caídas a diferentes alturas.
Esta situación generalizada de deterioro del graderío impide el desarrollo de actividades de cualquier tipo en este espacio, por su grado de inseguridad e insalubridad.
Con el objeto de devolver a este lugar unas buenas condiciones urbanísticas que permitan la vuelta al mismo de actividades culturales y de esparcimiento para el uso y disfrute de la población, Urbanismo ha redactado y aprobado un proyecto técnico, que ha comenzado a ejecutar en estos días.
Las obras consisten en la reparación de los elementos deteriorados que formalizan el graderío y muros interiores del auditorio, la sustitución de la rampa impracticable actualmente existente por otra con una pendiente accesible y con pasamanos a ambos lados y, el arreglo tanto de la barandilla metálica que bordea el auditorio como del banco corrido situado junto a los terrenos de ADIF, aportando las piezas que faltan. Por otra parte, para hacer más amable el espacio que da acceso al graderío, se creará un nuevo parterre y dos alcorques para la plantación de cinco ejemplares de paulonias. La inversión generada por todos estos trabajos es de 60.000 euros.
Plaza José Hormigo González
Este amplio espacio libre de unos 1.900 m2 está compuesto por dos pistas deportivas, una de futbol sala de pavimento de hormigón en buen estado de conservación, y un espacio anexo de albero compactado con dos canastas de baloncesto.
El ámbito en su conjunto está bordeado por un acerado con evidentes signos de deterioro, tales como baldosas rotas o sueltas por el efecto de las raíces de los árboles y la falta de una adecuada conservación. Asimismo, existen desniveles en el pavimento que ponen en riesgo de caídas y tropezones a los viandantes, además de no cumplir con la normativa de accesibilidad vigente.
A estas circunstancias del acerado se suman el mal estado de la valla metálica que protege la pista de fútbol sala (descolgada y doblada sobre el nivel del suelo) y la oxidación de las canastas de baloncesto.
Para resolver todos estos desperfectos y garantizar un adecuado uso de estas instalaciones por parte de sus usuarios, Urbanismo está ahora mismo interviniendo en en este espacio. La actuación trata fundamentalmente de mejorar el pavimento del acerado de borde además de reparar o sustituir los elementos de mobiliario urbano deteriorados, tales como la valla metálica de la pista de fútbol y las canastas de baloncesto. En lo tocante a esta pista deportiva, se va proceder también a sustituir el actual pavimento de terrizo por otro de hormigón.
Las mejoras en esta zona se completarán con la limpieza, desbroce y relleno de zahorra del espacio terrizo existente en los terrenos que colindan con las vías de RENFE.
Todos estos trabajos están valorados en 40.000 euros.
En definitiva, la Gerencia de Urbanismo está llevando a cabo en la actualidad dos significativas actuaciones, demandadas y esperadas por los vecinos de esta zona de Sevilla, con las que este organismo procura la puesta a punto de estos importantes espacios libres, garantizando su uso en perfectas condiciones de seguridad y accesibilidad.
Las obras, que acaban de comenzar, han sido visitadas estos días por el delegado de Hábitat Urbana, Cultura y Turismo,Antonio Muñoz, y por la delegada del distrito Bellavista-La Palmera, Carmen Fuentes. El primero, enmarcó esta actuación dentro del programa de inversiones municipales en los barrios para hacer “una ciudad más habitable y sostenible y cumplir además los objetivos de mejora de la accesibilidad incluidos en el plan municipal”. “Son inversiones que además contribuyen a la reactivación económica y social de la ciudad tras la crisis sanitaria”, apuntó Muñoz.
En ambos casos, los trabajos cuentan con un plazo de ejecución de dos meses, de modo que podrán quedar terminados a lo largo de este verano.