Urbanismo aprueba el proyecto de la primera fase de obras estructurales en el Pabellón de ingreso de la antigua cárcel de Ranilla valorado en un millón y medio de euros
04/11/2020
La Comisión Ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sevilla ha aprobado esta semana iniciar el procedimiento de contratación de una primera fase de obras para la rehabilitación del edificio que ejerció como Pabellón de Ingreso de la desaparecida cárcel provincial de la Ranilla, en el barrio de Nervión. Se trata de los únicos restos de esta antigua prisión, levantada en 1933 y demolida en 2008, que aún permanece en pie, tras la transformación de este espacio en un parque público para el barrio, un centro cívico y la sede central de la delegación de Gobernación.
Esta primera fase de la intervención, centrada en los trabajos de consolidación, se puede poner en marcha gracias al plan extraordinario de inversiones a través del Patrimonio Municipal del Suelo aprobado el pasado mes de septiembre dentro de la estrategia de reactivación económica y social y fomento del empleo en la ciudad.
La edificación de forma rectangular y desarrollada en dos plantas, se levanta sobre una parcela de 1.538 m2, y cuenta con una superficie construida de 1.982,44 m2. En su interior se dispone un patio central ajardinado de 420 m2.
Con su rehabilitación, el Ayuntamiento de Sevilla pretende garantizar su conservación como legado de aquel tiempo y de su significado en la historia reciente de la ciudad. No en vano, el edificio está declarado Lugar de Memoria Histórica de Andalucía e incluido en el Catálogo General de Patrimonio Histórico. De acuerdo con esta catalogación, su destino futuro estará ligado ala Memoria Histórica Democrática en varias vertientes: expositiva, formativa – pedagógica y de investigación.
El proyecto redactado y aprobado por la Gerencia de Urbanismo responde sobre todo a necesidades de tipo estructural, haciendo frente a diversas patologías y deficiencias detectadas en análisis de diagnosis previos realizados. En concreto, el edificio fue sometido en 2010 a estudios patológicos que pusieron de manifiesto la necesidad de intervenir en las cubiertas y estructura. Por consiguiente, las obras previstas en esta primera fase de actuación van dirigidas a realizar trabajos de conservación de dichas cubiertas y estructuras, incluyendo la de todos los muros. Su diseño se basa en la ejecución de una serie de forjados unidireccionales, similares a los actuales, que son capaces de soportar las nuevas cargas del edificio y que se anclan a los muros existentes del edificio. Para las cubiertas se plantea la colocación de una nueva estructura auxiliar, paralela a la actual, que no asumiría ya misión resistente, con el fin de soportar mejor los esfuerzos. Conjuntamente con ello, se trazará e instalará una nueva red de saneamiento para asegurar el perfecto funcionamiento de este servicio en un futuro, de acuerdo con el uso que finalmente se asigne al edificio. Esta propuesta de intervención de la Gerencia de Urbanismo ha sido refrendada por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, que ha valorado de forma positiva la misma.
Se trata, por tanto de obras de consolidación necesarias para la conservación y el mantenimiento de esta edificación y que van mucho más allá de un proyecto de actuaciones urgentes ejecutado por la Gerencia de Urbanismo hace siete años y en el que este organismo invirtió alrededor de 70.000 euros en actuaciones de seguridad en cornisas, cubiertas, aleros y particiones interiores.
Las obras de carácter estructural previstas en esta ocasión tienen un presupuesto de 1.542.310 euros y un plazo de ejecución de doce meses. Durante este tiempo, el Ayuntamiento de Sevilla avanzará en la concreción del proyecto final que acogerá este inmueble como espacio de referencia dela Memoria Histórica, de manera que puedan elaborarse los documentos correspondientes a su futuro contenido y con ello el programa del edificio.