Donde el pasado y el presente se encuentran
Operarios de la empresa restauradora limpiando con brocha el lienzo de la muralla. Al fondo, la Torre Blanca
04/02/2021
De la amplia muralla de siete kilómetros que rodeó Sevilla antes de que la mayor parte de ella se derribara a partir de mediados del siglo XIX, y que conformó en su interior uno de los recintos amurallados más grandes de Europa en la alta Edad Media, el tramo que discurre desde el Arco de la Macarena hasta la antigua Puerta de Córdoba, es el mayor de los que se conserva del antiguo perímetro. El Ayuntamiento de la época lo indultó como testimonio de la Sevilla que fue.
Construida sobre una estructura porosa de tapia formada por cal, arena y guijarros, la muralla que se levantara durante la Sevilla Islámica, allá por el siglo XII, y que ha llegado hasta nuestros días, lo ha hecho no sin pocos daños, sobre todo en sus elementos estructurales, obligando al Ayuntamiento de Sevilla a actuar en diversas ocasiones para garantizar el mantenimiento de este Bien, tanto de manera general como puntual.
Para poner definitivamente en valor este lienzo de 560 metros de longitud de la antigua muralla almohade, el Ayuntamiento, a través de la Gerencia de Urbanismo, ha trazado ahora una estrategia que recoge varias actuaciones sobre diferentes aspectos y elementos de la misma.
Recuperación de la cara intramuros
La primera intervención ha comenzado a ejecutarse justamente estos días. Se centra en la cara interior o intramuros de la muralla, con trabajos que van dirigidos a recuperar el aspecto original de las fábricas de tapia, actuando básicamente para mitigar su degradación pero conservando su pátina y todo el valor narrativo de las trazas impresas sobre las mismas. Se trata pues de una intervención “epidérmica” para devolver a este elemento su aspecto originario y restituir conjuntamente sus valores históricos y arquitectónicos, garantizando de este modo que siga conservándose a través de los siglos.
No en vano, este resto del recinto amurallado de la ciudad, llamado popularmente Murallas de la Macarena, está declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento Nacional, y constituye un hito patrimonial e histórico de incuestionable valor para la ciudad, además de un rasgo identitario clave de la historia de Sevilla. Consciente de ello, y de la importancia de este elemento y del proyecto conservador propuesto, la intervención ha recibido el apoyo financiero del Ministerio de Fomento con cargo al Programa estatal del 1,5 % Cultural. La Gerencia de Urbanismo presentó esta propuesta a la convocatoria de estas ayudas correspondiente al año 2018, resultando seleccionada. La aportación económica del Ministerio se concreta exactamente en el 43,24% del total del presupuesto de inversión, que asciende a 920.172 euros y que finalmente ha sido adjudicado en 738.438 euros. El ayuntamiento, por su parte, asume el 56,76% restante.
Recién comenzadas estas obras, la previsión es que se desarrollen a lo largo de los próximos doce meses.
Cara interior de la muralla, por la calle Macarena
El Arco de la Macarena
La siguiente actuación municipal sobre este tramo de muralla se centrará en el Arco dela Macarena. Este acceso es, junto con la Puerta de Córdoba y el Postigo del Aceite, una de las tres únicas puertas de la muralla histórica que ha sobrevivido del total de catorce con las que llegó a contar. Exactamente, era la entrada a la ciudad que se situaba más al norte, la mayor de todo el conjunto y por la que históricamente entraban los reyes a Sevilla. De allí, partía además el antiguo camino de herradura hacia Extremadura. Aunque hoy día carece de utilidad práctica, su permanencia constituye, junto con la del propio tramo amurallado, un icono de la ciudad de Sevilla.
La intervención sobre este elemento, igualmente declarado BIC, se considera complementaria de la operación puesta en marcha sobre el lienzo dela muralla. Las tareas previstas consistirán especialmente en la reparación de los pináculos de remate y en la sustitución de la impermeabilización de la cubierta del propio Arco. Tras esta consolidación, se procederá a la eliminación de las reparaciones puntuales realizadas con morteros de cemento, así como de las pinturas aplicadas con productos acrílicos. Urbanismo procederá también a la reparación de las diversas patologías que afectan a las fábricas, tanto en las de ladrillo como en las tapias. De esta forma, se sustituirán las piezas deterioradas, se repararán las fisuras existentes y, se repondrán las faltas.
Asimismo se restaurarán los paños de azulejería del Arco, mediante limpieza y eliminación de depósitos, algas y demás elementos perjudiciales, consolidación de la superficie vítrea y protección final.
Se procederá también a la restauración de policromía aparecida en la cornisa, mediante consolidación química del revestimiento, inyección de mortero de cal en zonas con desprendimientos, eliminación manual de capas de cal sobre la policromía y reintegración con pigmentos naturales de las pérdidas de policromía. También se intervendrá en las columnas de piedra, limpiándolas mediante aplicación de papetas.
Por último, se aplicará un revoco de mortero de cal terminado con un estuco y rematado mediante un enjalbegado de cal, proporcionando un acabado más acorde con el carácter de Bien de Interés Cultural del monumento.
El conjunto de la actuación ha sido valorado en 204.000 euros y el plazo de ejecución previsto es de seis meses. El Ayuntamiento ha incluido esta intervención sobre el Arco de la Macarena en la relación de proyectos públicos de inversión a desarrollar en el marco del Plan Municipal Extraordinario de Inversiones a partir de la enajenación de parcelas del Patrimonio Municipal de Suelo.
La propuesta ha sido ya refrendada por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, y será licitada en breve.
La Puerta de Córdoba
Justo en el otro extremo de las Murallas de la Macarena, se alza la segunda de las tres antiguas Puertas de Sevilla que han quedado en pie, junto con el Arco de la Macarena y el del Postigo.
Esta Puerta forma parte en la actualidad de una unidad estructural con la iglesia de San Hermenegildo, cuya propiedad corresponde a la Hermandad de San Hermenegildo. Ésta ha presentado recientemente un proyecto para la ejecución de actuaciones de emergencia en esta antigua iglesia del siglo XVII que incluye la rehabilitación de la Puerta de Córdoba. Para apoyar a la Hermandad en este cometido, el Ayuntamiento Pleno aprobó a finales del pasado año colaborar económicamente con una aportación de 70.000 euros que se recogerá en un Convenio de Colaboración entre ambas entidades.
Antigua Puerta de Córdoba
El lienzo extramuros
A las actuaciones municipales sobre la cara interna de la muralla, el Arco de la Macarena y la aportación acordada para la rehabilitación de la Puerta de Córdoba, la Gerencia de Urbanismo suma un siguiente proyecto para restaurar y consolidar la cara externa de este tramo de la muralla, esto es, la parte extramuros. De esta forma, Urbanismo restaurará también esta cara de la muralla, después de que lo está haciendo ya en su parte intramuros.
Vista exterior de la Muralla
El proyecto redactado contempla actuaciones de tipo preventivo y correctoras tanto en el lienzo, como en la barbacana (muro que se antepone a la muralla propiamente dicha), en la liza (espacio entre la barbacana y la muralla) y, en las torres, entre las que destaca la Torre Blanca, que se acondicionará en esta fase. Igual que en su cara interna, las patologías más extendidas están relacionadas con el deterioro superficial generalizado de las fábricas de tapial y con la pérdida puntual de material. El objetivo es consolidar las zonas que lo requieran mediante la aplicación de tratamientos epidérmicos específicos, decididos tras los estudios técnicos realizados.
El presupuesto de esta actuación es de 1.785.765 euros y también en esta ocasión será cofinanciada por el Ministerio de Fomento con cargo nuevamente al Programa estatal del 1,5 % Cultural. Tras obtener el respaldo económico para la intervención intramuros, la Gerencia de Urbanismo presentó este nuevo proyecto a la última convocatoria de dicho programa, obteniendo la máxima valoración posible del Ministerio, que le ha otorgado una puntuación de cien sobre cien. De esta forma, se reconoce tanto la importancia del Bien como la procedencia del proyecto redactado por Urbanismo, que plantea una intervención desde el máximo respeto a los valores patrimoniales, arquitectónicos y culturales de este resto de la muralla islámica.
La aportación estatal será en concreto de 803.594,25 euros (el 45% del total del proyecto) correspondiendo la cantidad restante al Ayuntamiento de Sevilla.
Potenciar el valor de este tramo de la antigua muralla y subrayar su valor como elemento indispensable del paisaje urbano de Sevilla y como testimonio vivo de su historia, es por tanto un objetivo prioritario del Ayuntamiento de Sevilla, como se evidencia con el impulso a todos estos proyectos. Así lo ha resaltado su alcalde, Juan Espadas, que ha visitado hoy los recién comenzados trabajos de conservación. Espadas, que se ha referido a la Muralla de la Macarena como uno de los elementos fundamentales de la historia de la ciudad, ha subrayado la potente inversión que el Ayuntamiento de Sevilla ha previsto sobre este Bien y que forma parte de una ambiciosa estrategia municipal para conservar y realzar el patrimonio histórico sevillano. “Poner en valor la Muralla de la Macarena de forma clara y contundente es un objetivo prioritario de este gobierno municipal”, ha reconocido.
El alcalde y el delegado de Hábitat Urbano, han conocido de primera mano los detalles del proyecto de restauración
En estos muros que quedan en pie del antiguo recinto amurallado, el pasado y el presente de Sevilla se reúnen, interaccionan y se dan la mano. Acaso en ellos se guarden aún los lamentos prorrumpidos cuando la ciudad decidió derribar para siempre su muralla para abrirse paso al futuro y a la modernidad.
La muralla de noche, iluminada con luz azul